Desde el inicio de la etapa preoperativa de las empresas, es muy común que se comiencen con distintas operaciones Intercompañías: apoyo administrativo y técnico, una etapa temporal de cargos a cuenta de la nueva entidad (reembolso de gastos), proveeduría, financiamiento, entre otras; donde las principales preguntas son: ¿Cuánto y cómo facturar?, ¿Qué markup emplear?, ¿Qué documentos adicionales se tienen que obtener? Por lo tanto, es fundamental una planeación y diseño sobre las operaciones Intercompañías que se llevarán a cabo dentro de los primeros meses y cuáles se tendrían en los siguientes años de la nueva empresa; además, de considerar las declaraciones asociadas, así como el soporte fiscal y de precios de transferencia correspondiente.
Por último pero no menos importante, los conceptos como razón de negocios, la materialidad y fecha cierta son cruciales en el momento de obtener el soporte de todas las operaciones de los contribuyentes; por lo tanto, el documentar desde el inicio las razones que dan origen a las operaciones Intercompañías, el soporte adecuado para cada operación (contratos, órdenes de compra, presupuestos, expedientes de comercio exterior, constancia de residencia, entregables de los servicios, entre otros) y el demostrar que cada operación cumple con el principio de valor de mercado, será crucial para reducir el riesgo de revisiones fiscales en los Grupo Multinacionales.
